La diferencia entre los conceptos de "destrucción" (Destruktion) en Heidegger y "deconstrucción" (Déconstruction) en Derrida es significativa, aunque el segundo retoma y transforma el primero.
Destrucción en Heidegger
Aparece en Ser y tiempo (1927) como parte de su proyecto ontológico. Su Objetivo no es aniquilar, sino desmantelar críticamente la tradición metafísica occidental para revelar sus supuestos ocultos y recuperar el sentido originario del "ser", olvidado desde Platón.
El Método es deshacer capas de interpretaciones acumuladas (escolástica, cartesianismo, etc.) que oscurecen la pregunta por el ser.
Analizar cómo el concepto de "tiempo" en Aristóteles o Kant encubre una comprensión más primordial vinculada a la existencia, el Dasein.
Deconstrucción en Derrida
Retoma la Destruktion heideggeriana, pero la radicaliza desde la lingüística y el posestructuralismo.Su Objetivo es mostrar cómo los textos filosóficos y literarios se desestabilizan a sí mismos al contener contradicciones internas (oposiciones binarias como habla/escritura o presencia/ausencia).
El Método es exponer jerarquías implícitas en los textos y subvertirlas por ej.: Rousseau valora el habla sobre la escritura, pero sus propios argumentos dependen de la escritura. Jugar con la ambigüedad del lenguaje (différance, suplemento) para mostrar que el significado nunca es fijo.
Heidegger (Destrucción) Ontología (el ser) Despejar tradiciones Recuperar sentido originario Existencia (Dasein)
Derrida (Deconstrucción) Lenguaje y textualidad Subvertir oposiciones binarias Mostrar indecidibilidad Huellas y diferencias textuales
Heidegger con destruir la noción de "sujeto" cartesiano para revelar al Dasein como ser-en-el-mundo.
Derrida con deconstruir el "logocentrismo" mostrando cómo la escritura, marginada por la metafísica, es condición de posibilidad del habla.
Mientras Heidegger busca desmontar para recuperar un fundamento, Derrida muestra que no hay fundamento último, solo juego de significados. La deconstrucción es, en parte, una respuesta posmoderna a la destrucción heideggeriana.
Destruyendo o Deconstruyendo la Deconstrucción
Una crítica heideggeriana, desde la Destruktion, a la deconstrucción derridiana podría articularse en varios puntos clave, basados en las diferencias fundamentales entre ambos proyectos filosóficos. Heidegger probablemente objetaría la radicalización lingüística y la renuncia a todo fundamento que propone Derrida.
Contra el Abandono de la Pregunta por el Ser
En Heidegger su Destruktion apunta a recuperar la pregunta por el ser (Seinsfrage), despejando los obstáculos metafísicos que la oscurecen, como el olvido del ser en la tradición occidental.
Crítica a Derrida
La deconstrucción convierte el ser en un efecto de lenguaje, como "huella" o différance, disolviendo su carácter ontológico. Para Heidegger, esto sería caer en un nuevo olvido del ser, ahora bajo el dominio del juego textual.
"Derrida convierte el ser en un significante más, pero el ser no es un signo: es aquello que permite que los signos sean".
La Lingüistización Radical vs. la Experiencia Originaria
El lenguaje es la "casa del ser", pero no es un sistema autónomo de signos. La Destruktion busca acceder a una experiencia pre-teórica del ser por ejemplo.: la angustia y el ser-para-la-muerte.
Crítica a Derrida
Al reducir todo a texto y diferencia, Derrida pierde el arraigo en la existencia concreta (Dasein). La deconstrucción sería una "metafísica del lenguaje" que ignora la apertura ontológica del ser-en-el-mundo.
"La différance derridiana es aún más abstracta que la subjetividad cartesiana que yo critiqué".
La Imposibilidad de un Fundamento vs. la Búsqueda de lo Originario
La Destruktion no niega todo fundamento; busca uno más originario por ej.: el Dasein como horizonte para entender el ser.
Crítica a Derrida
La deconstrucción celebra la indecidibilidad y la falta de centro, pero para Heidegger esto es nihilismo, renunciar a la pregunta por la verdad del ser.
"Derrida tiene razón al mostrar las aporías de la metafísica, pero su solución es huir hacia el juego infinito, no hacia una nueva escucha del ser".
La Política Implícita. Crítica al Relativismo
Su proyecto tiene un tono arcaico, recuperar lo griego originario y hasta conservador, su polémico vínculo con el nazismo.
Crítica a Derrida
La deconstrucción, al negar todo fundamento, carece de criterio para la acción política. Para Heidegger, esto sería un peligroso relativismo que evita la "decisión" auténtica, un concepto clave en Ser y tiempo.
"Sin un arraigo en el ser, la deconstrucción solo puede deconstruirse a sí misma".
¿Qué Diría Heidegger?
Derrida convirtió la Destruktion en un juego textual, perdiendo su dimensión ontológica.
La deconstrucción es hija de la metafísica que pretendía superar, pues al negar el ser, repite sus olvido.
Falta de "seriedad" en el juego derridiano sería una evasión ante la urgencia de la pregunta por el ser.
En síntesis, Heidegger vería en Derrida a un brillante crítico de la metafísica, pero no a un pensador del ser, sino a un heredero de Nietzsche, a quien Heidegger mismo criticó por su "nihilismo".
¿Y Derrida respondería? Probablemente diría que Heidegger aún soñaba con un "origen perdido", mientras que la deconstrucción muestra que nunca hubo tal origen, solo sustituciones y diferencias.
Deconstrucción como Herramienta de Destrucción
En fin podemos entender la Deconstrucción como un medio moderno para desarmar el discurso muchas veces filosóficos de los laboratorios ideológicos y políticos. Solo así y no como fin que es lo que suele hacerse hoy para atomizar la sociedad y desintegrar la cultura enajenando su Ser. El método para volver al Ser, como decía Heidegger, la tradición es volver a las cosas para cultivar la tierra como sinónimo de la misma Cultura que hace a una cosmovisión. Está cosmovisión es el interactuar con el mundo trascendiendo ya las ideas y entidades, relacionarse a través de la experiencia de vida/muerte.
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